2568
Puntos Mientras tanto te lo envio asì ………….. Anécdota en un restaurante
Daniela y yo aún nos conocíamos personalmente. Un día me escribió: «¡Hola! ¿Nos vemos?». Inmediatamente reservé una mesa para el sábado siguiente en uno de los restaurantes más exclusivos de la ciudad. Llegué temprano y, mientras que la esperaba, imaginaba cómo sería la velada … miradas lánguidas, palabras susurradas, manos que se rozaban… Daniela llegó luciendo un precioso vestido de escote pronunciado y zapatos de tacón alto. Tenía el pelo largo y rubio y avanzaba con paso elegante, como una princesa. De repente un camarero con una bandeja en la mano chocó con ella. Con esos tacones altísimos, le costó mantener el equilibrio, resbaló en el suelo y se cayó de espaldas en medio del restaurante. Corrí inmediatamente a ayudarla.
-Hola Daniela ¿estás bien? — le pregunté.
“Creo que sí…”, respondió ella, intentando quitarse las hojas de lechuga y los tomatitos rojos del pelo.
Extendí mi mano, la ayudé a levantarse y la conduje a nuestra mesa. Unos minutos después ambos comenzamos a reír y a bromear sobre lo que había sucedido. Y luego le dije:
— Daniela, estabas maravillosa con todas esas plumas verdes en tu cabeza y esos rubíes rojos que adornaban tu cabello.
¡Había conocido a mi futura esposa!
CLAUDIO
Izar1 comentario
5528
Puntos Hola, Claudio 😊 Ya está solucionado. De todas formas, copio y pego tu redacción yo misma en el documento de Drive. ¡Hablamos!
